Fogueras
El fuego no quema los recuerdos El fuego nocturno en las calles del pueblo nos trae recuerdos de tiempos en que uno retrasaba la decisión de acostarse pensando en el frío de las sábanas que sólo se conseguía templar con la bolsa de agua que bullía en un puchero junto al fuego. La leña era imprescindible en los hogares para calentarse en los duros inviernos, también en la cocina como material de combustión y para calentar el agua del caldero en los mondongos. Bufa del cerdo. Foto: Beatriz Rausa Siendo el cerdo un animal fundamental en la alimentación por estas tierras no era extraño que, siguiendo ritos milenarios, se reservase una parte del cerdo –sacrificado en estos días del invierno para facilitar con el frío su conservación— para que el fuego quemase las vejigas infladas que, supuestamente, contenían los espíritus malignos que dieran al traste con las rosadas carnes de la matanza. Foto: Cristina Allue Las fogueras de sanantón siguen siendo lugar de reunión de los ve